MIAMI, Estados Unidos.- El cantante canadiense Justin Bieber fue puesto en libertad luego de pagar una fianza de 2.500 dólares, y sus fanáticas colmaron la puerta de la prisión, para darle un caluroso saludo de bienvenida.
La actitud, polémica, demuestra que las “believers” son incondicionales con su ídolo, aunque su imagen de niño bueno sea parte de un pasado muy lejano. El jovencito se está acostumbrando a los excesos y los problemas con la ley, pero esto no hace más que aumentar la devoción de sus seguidoras.
Cabe aclarar que en la multitud que se agolpó para ver en vivo la puesta en libertad de Bieber, había también muchos miembros de la prensa, algunos curiosos, y otros que fueron a mostrarle al cantante su descontento y reprobación.
En la jornada de ayer, el “principito del pop” había sido detenido por conducir tras haber bebido alcohol, fumado marihuana y tomado medicamentos con receta, en Miami Beach.